www.cocinaparaindignados.com |
Cuando yo era pequeño mi abuelo
se pegaba unos papelitos en dos dedos, uno de cada mano y los
ponía en el borde de la mesa, escondía el resto debajo y recitaba: Dos amiguitos se fueron a cagar; se va Juan, se va Pedro (y escondía los dedos uno tras otro bajo la mesa). Y continuaba: vuelve
Juan y vuelve Pedro (y aparecían otros dedos sin papel) ¿Dónde
se han ido esta vez? Volvía a recitar aquella cancioncilla y misteriosamente,
terminaba mostrando los dedos con los papelillos de nuevo. A mis primos y a mi
nos fascinaba aquello y nos pasábamos el rato colgados de él insistiendo en que
lo repitiera. Era alucinante que dos dedos llamados Juan y Pedro se fueran a cagar y perdieran el
papel por el camino, aunque nunca nos planteamos si antes o después de terminar
lo que fueron a hacer.
Dos papelitos se fueron a cagar.
Y yo me pregunto ¿por qué no se van a cagar como Juan y Pedro el Banco
Central Europeo, la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional y nos
dejan en paz de una vez? Con esa obsesión suya, con ese empeño en recomendar,
advertir y obligar con cara de buenos, medidas de ajuste que caen como mazazos
sobre nuestras espaldas, insaciables en su empeño de convertir Europa y el
mundo en una cola infinita de pobres y parados. Que se vayan a cagar, por
favor, y que no vuelvan.
En homenaje a su improbable marcha a las letrinas más alejadas de nuestra existencia, démonos un festín con este trío de ases. Un plato para el medio; una troika increíblemente fácil de preparar, con la apariencia de un bocado exquisito, que lo es y la elegancia y sensualidad como carta de presentación.
Para chuparse los dedos y quedar
bien de principio a fin.
NECESITARÁS (para 4 personas)
- 90gr de mousse de pato (u oca).
- Semillas de amapola (se compran en el herbolario).
- Un puñado de quicos.
- Un poco de azúcar moreno.
- Mermelada de higos.
- Mermelada de calabaza.
ELABORACIÓN
- Saca el trozo de mousse de su envoltorio y córtalo en 3 triángulos (normalmente en el supermercado encontrarás las porciones envasadas en forma de trapecios, por lo que es sencillo).
- Poner en un platito un puñadito de semillas de amapola y rebozar en él uno de los trozos.
- En un mortero pica los quicos y reboza con ellos otro de los trozos.
- Cubre la superficie del último con azúcar moreno y con un soplete de cocina quémalo. Si no tienes soplete procede como con los anteriores y rebózalo en el azúcar por todas sus caras.
- Disponer en una fuente los 3 trocitos con una pequeña cucharada de las mermeladas entre ellos.
- Servir acompañado de pequeñas tostadas.
- A triunfar.
NOTA
El tipo de mermelada que utilices
va a gustos, pero las que te indico van
de maravilla y he probado con varias. Puedes hacerlas tú o comprarlas, las hay
buenísimas en el mercado. Las nuevas de la marca Hero están muy bien y son muy
económicas. Algo más sibaritas y caras pero deliciosas son las de la marca Chinata,
las de la Cartuja de Val de Cristo o la Jalancina, entre
otras.
MÚSICA PARA ACOMPAÑAR
Para la elaboración: Jodida pero contenta, de Concha Buika.
Para degustar: No habrá nadie en el mundo, de Concha Buika.
VINO RECOMENDADO
Marina Alta Moscatel de la
Marina. D.O.C Alicante. servir muy, muy
frío.
DÓNDE COMER
Junto al mar, recostados sobre
una roca plana de la escollera, con mantelito y copa de vino, mecidos por el
sonido de las olas rompiendo contra las piedras al atardecer.
QUÉ HACER PARA COMPENSAR LAS CALORÍAS
Has decidido comerlo en un
atardecer de pesca con tu pareja ¿no? Entonces, echa la caña, apóyala bien y
espera y mientras tanto…echa la caña y no esperes demasiado, como piquen se
acabará la magia.